Una directiva se expresó sobre los hechos de violencia juvenil
Una carta que lleva la firma de María Graciela Favre expresa que "pasados ya unos días del triste episodio de la Cena de Egresados del Colegio La Salle quisiera compartir algunas reflexiones personales que surgen de mi experiencia como madre , como profesora y como directora. Lo ocurrido me produce una profunda tristeza y es, a mi juicio, fruto de una sociedad enferma que los adultos hemos construido y donde nuestros niños y jóvenes tratan de sobrevivir como pueden".
Según le indicaron a FM de la Ciudad la docente asegura que "casualmente, o no, cayó en mis manos un libro del maestro y licenciado Rolando Martiñá (Titulado justamente: ¿Qué hacemos con los chicos?) quien afirma: “ Ycomo suelo decir (aunque cambiando una palabra que me parece más gráfica pero menos publicable), un adulto es alguien que conserva el derecho de cometer de vez en cuando alguna tontería(bol…) pero ya no el de hacerse el tonto (bol….)”. El mismo autor explica que las sociedades han ido inventando dos grandes tipos de instituciones:".
1)Las destinadas al control interno, familia y escuela, dedicadas al aprendizaje y por lo tanto a la prevención, a través de la desaprobación de conductas dañinas y el estímulo de las consideradas correctas para cada grupo, en cada tiempo y lugar.
2)Las de control externo: leyes, policías, tribunales y cárceles, destinadas a quienes no habiendo querido, podido o sabido aprender a autocontrolarse necesitan ser “controlados” desde afuera, para preservar la vida y los bienes de los demás.
Todas estas instituciones , que son responsabilidad de los adultos, están hoy en crisis, han dejado de cumplir su función y muchas veces se echan la culpa unas a otras de lo que está sucediendo.
Como adulto responsable de lo que ocurre en las de control interno (familia y escuela) creo que hemos criado chicos que han perdido de vista lo esencial (lo que tal vez nos está pasando también a los adultos) . He aquí sólo algunos ejemplos:
- Nuestros chicos saben que si se equivocan siempre habrá alguien que los “cubrirá” y que rara vez deberán remediar el daño que han hecho, con muchos padres que dicen “yo ya no puedo con mi hijo” y los dejan solos en esta sociedad cada vez más compleja y tentadora, y con un sistema educativo que aún no ha logrado conciliar inclusión con exigencia y responsabilidad.
-Consideran que una fiesta de egreso o de cumple es un fracaso si no es multitudinaria (aún con gente que ni conocemos y a los que poco le importa el motivo de mi fiesta) y con una serie de “agregados” no indispensables (llámese decoración, pilchas dignas de una estrella de la tele, espuma,cotillón, videos, barra de tragos, alcohol y desde hace un tiempo un nuevo invitado:la droga). Y quieren esa fiesta o nada. En fin, cosas que por supuesto los chicos no pagan de su propio bolsillo y que “exigen” a adultos que corren y se sacrifican trabajando muchas horas para poder pagar celus, viajes y lujos que ellos mismos no tuvieron, perdiendo un tiempo valioso que se podría dedicar a tomar unos mates y charlar sobre lo que les pasa y lo que realmente necesitan.
- Los pibes son cómodos, consiguen todo fácilmente, no valoran el esfuerzo y no saben lo que es desear algo mucho tiempo para después poder valorarlo (rompen baños y vasos hasta de un club del que tal vez son hinchas fanáticos) .Y de tanto no valorar los objetos se pasa casi naturalmente a no valorar al otro y a sentirse con el derecho de agredirlo no sólo física sino también verbalmente (en forma directa o vía face o twitter)
Los ejemplos sobran y no se agotan en esta lista. Pero ahora no tenemos más el derecho de hacernos los b…….., asumamos nuestra responsabilidad de ADULTOS en el lugar que a cada uno nos toca. El otro día fue el ojo de un egresado pero en cualquier momento puede ser la vida de uno de nuestros chicos.